Pandemia, guerra y ahora ¿otra enfermedad? Se dispara alerta en Europa

Un nuevo tipo de hepatitis, grave, de origen desconocido, está poniendo en alerta a Europa. Ataca a menores de edad que no cuentan con las defensas inmunológicas.

Por Claudia Fernández

SANTO DOMINGO, 20 de abril, 2022 (ADPRESS).- La comunidad mundial de nuevo comienza a preocuparse por el surgimiento de una enfermedad que destruye el hígado, en este caso de menores y lo peor es que se desconoce su origen y por qué ataca a este grupo etario.

Y, aunque hasta el momento no se ha reportado ningún fallecimiento, lo cierto es que el desconocimiento y falta de tratamiento para enfrentar lo que podría convertirse en una crisis de salud a nivel mundial, mantiene en alerta a las naciones del viejo continente.

Así lo da a conocer BBCmundo.com, medio que toma de referencia la publicación del microbiólogo español Ignacio López Goñi, en la revista The Conversation, ayer 19 de abril de 2022.

La preocupación no es para menos, las edades de los menores afectados oscilan entre los 2 y 6 años, los que menos defensas tienen ante ataques virales, ya que como señala el microbiólogo, reconocido internacionalmente por sus trabajos, especialmente los referentes al COVID-19, “no se puede descartar que se trate de un virus no identificado”, aunque no existe una plena seguridad de que este sea el caso, ya iniciaron las investigaciones.

“En las últimas semanas se está notificando un aumento de casos de hepatitis grave de origen desconocido en niños de entre 2 y 6 años en varios países. Por ejemplo, cada año se detectan enEscocia unos 4 casos anuales, pero ahora van ya más de 13 en un par de meses, asimismo, 74 casos se han reportado en Reino Unido, 3 en España (Madrid, Aragón y Castilla-La Mancha) y se están investigando algunos casos en Dinamarca, Países Bajos y en EE.UU, el Centro para el Control de Enfermedades (CDC) informa de 9 casos sospechosos en el estado de Alabama) Se están revisando posibles casos desde octubre que hayan podido pasar inadvertidos”, señala la publicación.

¿Inicio de una nueva pandemia infantil?

Para poner en contexto la situación, la hepatitis es una enfermedad inflamatoria que afecta al hígado. Su causa puede ser muy diversa: infecciosa (viral o bacteriana), inmunitaria (hepatitis autoinmune) o tóxica (alcohol, sustancias tóxicas o fármacos).

El problema radica en que, según los informes médicos, todos los niños estaban sanos una semana antes del diagnóstico. Los síntomas son los habituales en esta enfermedad: dolor abdominal, vómitos, diarrea, ictericia (coloración amarilla de piel y mucosas), picor cutáneo, coloración oscura de la orina y deposiciones con poca pigmentación, con la salvedad de que no presentan cuadro febril.

La situación se torna más preocupante porque a pesar de que hasta el momento no se ha reportado ningún fallecimiento, la mayoría de afectados ha debido ser ingresado en centros hospitalarios.

“De momento no ha habido ningún fallecimiento. Algunos se han recuperado, pero otros han tenido que ser hospitalizados, ”siete han requerido, incluso, trasplante de hígado , uno de los casos en España”, refiere la publicación. ¡Siete niños con hígados trasplantados! Es un llamado de alerta.

Desconcierto, ¿estamos frente a otra situación de emergencia?

Una de las cosas que tiene al mundo médico en estado de preocupación y desconcierto es el aumento de casos de la hepatitis desconocida en un lapso muy corto, la gravedad que reviste la enfermedad y las causas que la provocan.

En estos momentos, igual que sucedió al inicio de la pandemia de COVID-19, se barajan varias posibilidades e hipótesis sobre el surgimiento de este nuevo proceso infeccioso, y se descartan otras, lo cierto es que la nueva variante de hepatitis va ganando terreno.

En el marco de la pandemia de COVID-19 hay quien ha asociado estos casos a las vacunas sin que haya ninguna evidencia al respecto, ya que algunos se han reportado en niños no vacunados. Tampoco hay datos que apoyen convincentemente la hipótesis de que se trate de una nueva forma de presentación del virus.

En las últimas horas, ha ido cobrando fuerza la hipótesis de que el agente causante de esta hepatitis puede ser un adenovirus, pero los datos son aún preliminares y este tipo de virus que se transmite por contacto o por el aire raramente causa problemas hepáticos.

Para ilustrar mejor, la definición que de los adenovirus dan tratados médicos especializados, “virus con ADN que infecta las vías respiratorias, el aparato digestivo o el hígado del ser humano y de los animales”. En casos muy excepcionales, los adenovirus pueden causar una hepatitis fulminante.

Volviendo a The Conversation, el último boletín, publicado en la mañana de hoy miércoles, indica que se presume “que podría tratarse de una nueva variante de adenovirus más agresiva. Otra posibilidad es que fuera un adenovirus común pero que ahora tuviera un impacto más grave en niños con un sistema inmunológico más debilitado por la falta de exposición a otros patógenos debido al confinamiento y otras medidas durante la pandemia”.

Lo cierto es que de nuevo el mundo asiste expectante y de brazos cruzados a otra nueva amenaza en salud, que afectaría a la población más desprotegida, la niñez.