Inician mesas técnicas para implementar plan de acción regional sobre control de armas 2025–2035

Las autoridades dominicanas, en coordinación con la Organización de Estados Americanos (OEA), dieron inicio formal a las mesas técnicas de trabajo para ejecutar el plan de acción derivado de la Hoja de Ruta de Centroamérica y la República Dominicana, una estrategia regional enfocada en prevenir y combatir el tráfico ilícito y la proliferación de armas, municiones y explosivos.
El encuentro, realizado en la sede del Ministerio de Interior y Policía en Santo Domingo, marcó el comienzo de un proceso colaborativo entre los siete países firmantes del plan —Costa Rica, Belice, El Salvador, Guatemala, Honduras, Panamá y República Dominicana— con el acompañamiento de organismos internacionales y con miras a fortalecer la seguridad nacional y regional.
La hoja de ruta, firmada el 12 de febrero de 2025 en Washington, Estados Unidos, tiene una duración proyectada de 10 años (2025-2035), con una evaluación intermedia prevista para 2030. Esta iniciativa establece cuatro ejes fundamentales:
- Fortalecimiento normativo y coordinación interinstitucional
- Prevención de la violencia con armas de fuego
- Gestión del ciclo de vida de armas, municiones y accesorios
- Investigación y persecución penal del tráfico y uso ilícito de armamento
La ministra de Interior y Policía, Faride Raful, resaltó que el plan busca “actualizar marcos legales, prevenir desvíos, mejorar los controles fronterizos y vincular el control de armas con políticas de desarrollo”. Agregó que el esfuerzo trasciende gestiones gubernamentales y que el éxito dependerá de la colaboración interinstitucional y regional, especialmente en el intercambio de información para fortalecer la fiscalización de armas, muchas de las cuales ingresan ilegalmente desde Estados Unidos.
El evento contó con la participación de representantes del Ministerio Público, las Fuerzas Armadas, la Policía Nacional y otras instituciones clave, así como delegados internacionales. En ese contexto, Esteban de la Torre, representante de la OEA, destacó la “voluntad política” de los países involucrados y la importancia de una herramienta práctica y participativa que permita interrumpir el ciclo de violencia armada con acciones concretas durante los próximos cinco años.
Por su parte, Julia Sánchez, coordinadora residente de la OEA en República Dominicana, señaló el papel estratégico del país en el enfrentamiento al tráfico ilícito de armas, y subrayó el trabajo del Centro Regional de las Naciones Unidas para la Paz, el Desarme y el Desarrollo (Unlirec) en la región.
En representación de Unlirec, Silvia de Pedro presentó la experiencia de la Hoja de Ruta del Caribe, iniciativa impulsada por la Comunidad del Caribe (Caricom) desde 2019, que ahora sirve como modelo complementario. Esta hoja incluye 4 objetivos, 15 metas, 55 acciones y más de 100 indicadores de rendimiento para medir avances de los Estados en materia de control de armas.
El representante Walter Murcia destacó que República Dominicana ha logrado avances significativos, como la reducción de la tasa de homicidios a 7.9 por cada 100 mil habitantes, y advirtió sobre el papel central del tráfico de armas en delitos graves como homicidios, narcotráfico y trata de personas.
Durante el encuentro se reiteró que Centroamérica registró la tasa de homicidios más alta del mundo en 2022, siendo las armas de fuego, en su mayoría ilegales, el medio principal de comisión de estos crímenes. Las autoridades presentes coincidieron en la necesidad de trabajar de manera coordinada y sostenida para enfrentar el crimen organizado desde un enfoque integral y respetuoso de los derechos humanos.
La implementación de esta hoja de ruta representa un paso estratégico en la lucha contra la violencia armada, promoviendo una visión regional compartida y el fortalecimiento institucional a través de políticas públicas alineadas y sostenidas en el tiempo.





Deja un comentario